13 de noviembre de 2002 S.O.S
Dos días antes de lo que pasó, me asomé por la ventana del apartamento del mar y miré la costa. Estaba preciosa y limpia, como siempre. Dos días después lo miré y no podía imaginarme lo que ví. La costa siempre estaba brillante, pero aquel día estaba toda oscura, cubierta de petróleo. Yo pensé qué es lo que podría haber pasado, pero no entendía el motivo. Cuando me enteré, no me podía imaginar todo lo que habían sufrido todos los seres marinos que rodeaban las costas, todos los que murieron. Al día siguiente, ví a toda la gente en la orilla recogiendo petróleo, trabajando sin parar y muy tristes por lo sucedido. Para mi fue una pena ese destrozo de la costa. Fue una pesadilla para nosotros.
El Solé
